El controlador es el factor que determina si una lámpara o luminaria se puede regular y cómo. Hay, por ejemplo, controladores que funcionan con los sistemas DALI, 0-10 V o TRIAC (corte de fase). Si existe la opción de regular la iluminación LED para bajar su intensidad, recomendamos utilizarla. Si bajamos un 30 % la intensidad de la iluminación LED, el ahorro aumentará también en un 30 % y la vida útil será más larga. Se puede regular la intensidad de forma manual, por ejemplo, con un regulador incorporado, o automática mediante un sistema como el de DALI. El sistema DALI regula de forma automática la intensidad de la iluminación según la cantidad de luz diurna que haya en un espacio. Para ello, se instala un sensor con un dispositivo regulador: un coste adicional que se amortiza en muy poco tiempo.